Por: Juan Pablo Lotero - Ingeniero Mecatrónico.
El agromarketing,
como deja ver la propia palabra, está relacionada con el sector agropecuario y
con el marketing, y es que es el conjunto de técnicas y acciones estratégicas
que una empresa perteneciente al sector agro desarrolla con la intención de
alcanzar unos objetivos, entre los que se encuentra, normalmente, potenciar y
mejorar las ventas. La modernización ha
afectado a todos los sectores, incluido el primario y más concretamente al
agropecuario, esto se traduce en la necesidad del agromarketing para crear una
identidad clara de marca y facilitar la comunicación con otros usuarios, ya
sean otras empresas o posibles clientes.
Contrario a la
creencia popular, el sector agropecuario sí está ajustado a las circunstancias
actuales, de hecho, los productores y proveedores manejan tecnología de punta
que facilita y automatiza sus tareas diarias, se vincula al mantenimiento de
sus ganados y cultivos, es más, es impresionante el nivel de digitalización en
algunas granjas; sin embargo, la aplicación de las técnicas de agromarketing es
un aspecto todavía rezagado.
En el competitivo
mercado actual, es esencial que una empresa agropecuaria cuente con una
estrategia de marketing bien pensada para prosperar.
Una forma
estupenda de dar a conocer la explotación y sus productos es centrarse en
establecer relaciones con los clientes locales y ampliar el alcance utilizando
herramientas digitales como las redes sociales. Con tácticas de marketing
eficaces, los agricultores pueden mostrar la calidad de sus productos, educar a
su público objetivo sobre las ventajas, atraer compradores y fidelizar a los
clientes.
El marketing
puede ser uno de los factores decisivos a la hora de mejorar el rendimiento en
el sector, por lo que todas las empresas agropecuarias deben esforzarse por
crear una imagen de marca atractiva y una experiencia de servicio al cliente
excepcional para ganar tracción en el mercado.
En este sentido, se detalla algunas de las estrategias que
pueden implementar los grandes o pequeños productores:
Comercio
electrónico: el comercio electrónico es un canal alternativo a los canales de
venta tradicional, este mecanismo permite que los productores ajusten los
procesos de sus productos y alcancen beneficios. Para ello, es vital que se
tomen en cuenta aspectos como la conservación de los productos, la cadena de
frío y la logística de entrega.
Certificaciones
de calidad: la calidad de un producto no solo se basa en sus cualidades
propias, sino en los aspectos que son reconocidos por organismos y entidades
que evalúan sus propiedades. Si un producto goza de certificaciones que avalan
su procedencia natural, es importante que este aspecto sea destacado en todos
los canales y que los usuarios conozcan esta información relevante.
Posicionamiento
digital: además del comercio electrónico, los productos pueden ser posicionados
por medio de Internet y herramientas como las páginas web. Un portal es un
sitio clave para impulsar el reconocimiento de una marca, identidad y la
filosofía que está detrás, permitiendo que se amplifique la visibilidad de una
empresa y de todo su portafolio de productos.
Redes sociales:
es un hecho conocido que todos los clientes están en redes sociales, lo que
permite llegar a un público masivo. Tener presencia en estas plataformas es
idóneo para las compañías, no solo para incrementar sus ventas, sino para ganar
reconocimiento entre los usuarios y generar fidelización con la marca.
E-mail marketing:
la personalización del mensaje es lo de hoy, y esto es factible, gracias a las
campañas de marketing por correo electrónico. Por medio de este canal de
comunicación, las empresas y productores pueden informar a los clientes sobre
las promociones del mes, descuentos, venta de nuevos productos y novedades del
mercado.
También se debe
estructurar y/o detallar un plan estratégico de marketing el cual se puede
dividir en los siguientes aspectos.
ETAPA 1: Análisis
del mercado agro: El objetivo principal de esta fase es conocer e investigar
tanto el mercado externo como el interno. Es necesario conocer las necesidades
y los problemas de los clientes, para saber qué soluciones son las que están
esperando o necesitan y cómo ofrecerlas. Así como saber la información, los
conocimientos, las habilidades y los recursos que posee la empresa.
ETAPA 2:
Determinación de objetivos: Los objetivos que queremos determinar deben cumplir
una serie de normas. Deben ser específicos, medibles, alcanzables, relevantes y
tener en cuenta el tiempo. Hay dos tipos
de objetivos: cuantitativos y cualitativos.
ETAPA 3: Crear
las estrategias: Las estrategias de marketing digital son muchas y variadas,
después de haber seguido las dos primeras etapas, en esta toca elegir cuál es
la estrategia que mejor se adapta a nuestras necesidades.
ETAPA 4:
Ejecución de las estrategias: Controlar, organizar y planificar todas las
acciones y las estrategias que queremos llevar a cabo durante nuestro plan de
agromarketing digital.
ETAPA 5: Medición
de los resultados: El propio título ya dice lo que toca en esta etapa. Medir
los resultados de todas las acciones que hemos llevado a cabo para saber si
hemos conseguido cumplir con los objetivos que nos habíamos marcado en la etapa
2.
ETAPA 6:
Presupuesto del plan de agromarketing online:
Después de haber desarrollado todo el plan de agromarketing online,
revisarlo y controlar que todo esté bien, llega el momento de determinar el
presupuesto que queremos invertir en desarrollar ese plan que nos llevará a los
resultados que estamos esperando.
Con este tipo de
estrategias, el agromarketing brinda la oportunidad a los productores de
encontrar una nueva salida para la venta de sus productos. Además, contribuye a
consolidar la reputación de una empresa, lo que se traduce en un beneficio
económico directo para una marca.
El sector agropecuario es uno de los más importantes del
mundo. La comercialización en la agricultura es esencial para el éxito.
En el sector agropecuario hay muchas formas de
comercializar, tanto en línea como fuera de línea. Puede ser un reto, pero hay
muchos recursos disponibles para ayudar. Con una planificación y ejecución
cuidadosas, el marketing agropecuario puede tener éxito y ser altamente
rentable.