Por: Felipe Jaramillo Sánchez – Concejal.
Los incumplimientos de la Agencia Nacional de
Infraestructura (ANI) y Autopistas del Café en materia de cuidado, reparación,
mantenimiento y protección de la vida en las vías siguen siendo una constante
en el municipio de Chinchiná.
Desde una postura “técnica”, estas entidades siempre
encuentran respuestas convenientes para justificar su inacción. Sin embargo, a
continuación, se exponen diversas situaciones que permitirán al lector evaluar
si realmente se está garantizando la seguridad de los actores viales.
Una
entrada peligrosa y sin soluciones efectivas
La entrada a Chinchiná, especialmente en la vía hacia
Alpina, sigue representando un grave riesgo para los actores viales debido a
múltiples factores, entre ellos:
- Imprudencia de conductores y peatones.
- Exceso de velocidad.
- Falta de visibilidad para quienes ingresan y salen del barrio La Frontera.
- Deficiencia en la iluminación pública.
- Ausencia de reductores de velocidad o resaltos adecuados.
Aunque se llevó a cabo una intervención menor para reducir
la velocidad de los vehículos, las demás problemáticas persisten, exponiendo a
diario a transeúntes y conductores a situaciones de alto riesgo. La falta de
soluciones estructurales sigue poniendo en peligro la vida de quienes transitan
por este sector.
El caos en la vereda Guayabal.
Otro caso alarmante es el separador vial instalado en la
vereda Guayabal, en la conexión con la Autopista del Café. Esta obra se ejecutó
sin consultar a la comunidad, afectando a cientos de estudiantes, padres de
familia y conductores de vehículos tipo campero.
Ante
la falta de diálogo y la ausencia de una solución efectiva, se han llevado a cabo múltiples manifestaciones pacíficas exigiendo
la construcción de una glorieta (romboy) que permita un flujo vehicular seguro.
Mientras tanto, las personas continúan realizando maniobras peligrosas que
pueden derivar en nuevos accidentes, una situación que es responsabilidad
directa de Autopistas del Café y la ANI.
El
alarmante aumento de accidentes
Las cifras de accidentalidad en Chinchiná reflejan la falta
de acción por parte de las autoridades responsables:
- En 2024 se registraron 17 accidentes de tránsito, con múltiples víctimas fatales.
- En 2025 ya se reportan dos accidentes graves, el último ocurrido el 27 de enero, con saldo fatal el 2 de febrero.
Cada número representa una vida perdida, una familia
destrozada y una tragedia que pudo haberse evitado con medidas adecuadas.
Un
llamado urgente: alumbrado público y seguridad vial
Uno de los problemas más críticos en la vereda Guayabal es
la falta de alumbrado público en una vía nacional altamente transitada. La
oscuridad no solo aumenta el riesgo de accidentes, sino que también genera un
clima de inseguridad para los residentes.
La comunidad clama a gritos una solución tan básica como la
instalación de luminarias en este sector. Sin embargo, las solicitudes han sido
ignoradas sistemáticamente por Autopistas del Café y la ANI.
¿Cuántas
muertes más serán necesarias?
Es urgente que las autoridades competentes tomen medidas
inmediatas para garantizar la seguridad vial en Chinchiná. No podemos seguir
lamentando vidas perdidas por negligencia y desinterés. La comunidad exige
respuestas, pero sobre todo, acciones concretas.