El gerente del Hospital Santa Sofía, Carlos Alberto Piedrahita Gutiérrez, expresó con profunda preocupación el inminente cierre de las sedes en Palestina y Arauca, programado para el próximo 31 de diciembre. Según Piedrahita, esta medida se debe a la crisis financiera que atraviesa el sistema de salud, agravada por la falta de pagos oportunos por parte de la Nueva EPS, que adeuda más de 16 mil millones de pesos al hospital.
En
un comunicado difundido en redes sociales, Piedrahita lamentó que sus
solicitudes de apoyo financiero no hayan sido atendidas por la administración
nacional. “El señor presidente Petro tampoco ha escuchado nuestras
solicitudes”, afirmó, señalando directamente al mandatario como
corresponsable de la crisis que enfrenta la institución.
El
gerente explicó que la operación en estas sedes se ha vuelto insostenible
debido a los altos costos operativos y la insuficiencia de recursos asignados.
A pesar de los esfuerzos realizados para reducir pérdidas, la falta de un flujo
financiero adecuado obliga al hospital a tomar medidas extremas. Piedrahita
también advirtió que esta situación podría derivar en recortes adicionales en
áreas críticas como la Unidad de Cuidados Intensivos.
Alcalde
de Palestina manifiesta su preocupación
El
alcalde de Palestina, Álvaro Andrés Osorio Valencia, expresó su alarma por el
impacto del cierre en la salud de los habitantes del municipio. “Esta decisión
pone en riesgo la atención médica inmediata de nuestras comunidades y
profundiza la crisis que viven los usuarios del sistema de salud en la región”,
declaró en un boletín de prensa.
Osorio
hizo un llamado a la Gobernación de Caldas y a la Dirección Territorial de
Salud para que intervengan de manera urgente y gestionen los recursos
necesarios para garantizar la continuidad de los servicios médicos. “La
salud es un derecho fundamental, y no podemos permitir que las dificultades
financieras de la Nueva EPS sigan vulnerando la calidad de vida de nuestra
población”, concluyó.
El
cierre de las sedes en Palestina y Arauca evidencia la precariedad del sistema
de salud pública en Colombia y la necesidad de implementar reformas
estructurales. Mientras tanto, miles de usuarios quedarán desprotegidos, en
espera de soluciones que permitan restaurar su derecho fundamental a la salud.
Una
vez conocida la noticia, muchos ciudadanos se sorprendieron pues el medico
Piedrahita se ha destacado por su gestión y su capacidad para mejorar los
servicios médicos de los habitantes de su municipio. Piedrahita
Gutiérrez y el alcalde Osorio han sido defensores de las políticas del gobierno
Petro, línea del Ministro Lizcano y cercanos al Representante Wilder Escobar.
Fotografía: Caracol Radio