Chinchiná, 28 de septiembre de 2024. A pesar de los esfuerzos constantes de la Policía Nacional para fortalecer la seguridad en Chinchiná, el municipio aún enfrenta importantes desafíos en su búsqueda por consolidarse como un territorio más seguro. Con un reciente cambio en el mando de la estación de policía, los habitantes esperan que las nuevas estrategias puedan reducir la percepción de inseguridad que persiste en algunos sectores.
En esta ocasión, conversamos
con el Capitán Wilson Mendoza García, actual comandante de la estación de
policía de Chinchiná, quien compartió su visión sobre la situación de seguridad
en el municipio. A lo largo de nuestra entrevista, el Capitán destacó los
avances logrados en la reducción de homicidios, que pasaron de 120 anuales en
2010 a tan solo 7 en 2024. Aunque reconoció que el hurto sigue siendo un
problema, señaló que los casos han disminuido en comparación con años
anteriores, atribuyendo parte de la sensación de inseguridad a "falsas
denuncias". Además, con la temporada de cosecha próxima a iniciar, el
Capitán subrayó los retos que representa la llegada de nuevos habitantes y los
esfuerzos que se están llevando a cabo para mantener el orden. La seguridad,
aseguró, sigue siendo una prioridad para la administración y las fuerzas del
orden en el municipio.
Entrevista:
Jorge Patiño. Señor Capitán, gracias por atender la invitación
del portal www.lahoradelcafe.com.co
Capitán Wilson Mendoza García: gracias por la invitación.
J.p: ¿Es Chinchiná un municipio seguro?
C. W.M: La respuesta es sí, el municipio de Chinchiná es
seguro. A pesar de las circunstancias en las que vive nuestro territorio
nacional, son conflictos de todo el estado, de toda Colombia, inclusive de
problemas sociales que vive toda la humanidad. Y aún bajo esas circunstancias,
me atrevo a decir sí, Chinchiná es uno de los municipios más seguros de
Colombia. Cuenta con sus capacidades, con su población, que saben afrontar las
diferentes circunstancias de nuestro territorio nacional.
J.P: ¿Cómo han cambiado las tasas de homicidio y
otros delitos en Chinchina desde el año 2000?
C. W.M: Bueno, para el año 2000 debemos tener en cuenta
que de una u otra forma había afectaciones, había grupos delictivos, había
guerrillas, paramilitares, había una serie de situaciones, de organizaciones
que incrementó la tasa de homicidio llegando hasta más de 120 homicidios en un
año versus a una tasa de homicidio 2024 de 9 homicidios. O sea que sí ha
cambiado muchísimo y es el reflejo claro que nuestras autoridades y nuestros
antepasados trabajaron para garantizar esa seguridad y ese mejoramiento.
J.P: ¿qué factores contribuyen a la percepción de
inseguridad en el municipio?
C. W.M: Digámoslo así que por estar en cercanía entre
Manizales y Pereira la hace una ciudad de ser un foco de inseguridad. Tiene la
ventaja de crecer comercialmente, industrialmente, pero también tiene al mismo
tiempo la desventaja de poder llegar a atraer mucha población, población
flotante. Factores que contribuyen en la mala percepción de seguridad.
Habitantes de calle, es un flagelo que nuestro
municipio tiene que afrontar. Quizás la falta de civismo de nuestros
ciudadanos, no hay cultura ciudadana, la tienen, pero falta muchísimo.
J.P: ¿Cómo influye la llegada de nuevos habitantes
durante la temporada de cosecha en la seguridad de Chinchiná?
C. W.M: Para esta
temporada por obligación se tiende a incrementar los índices delictivos, debido
a que pasamos de 53.000 habitantes a cerca de 73.000 habitantes en tan solo 3
meses.
Va a atraer
personas que son en su mayoría extranjeros o personal de trabajo de otros
departamentos. Por supuesto, no todo el mundo viene con las intenciones de
trabajar de la mano y ahí es donde se presentan las consecuencias. Eso afecta
muchísimo el tema de índice delictivo de nuestro municipio.
Trae desarrollo, trae progreso, pero consigo
también va a traer un sin número de trastornos sociales o de afectaciones a la
seguridad de nuestro municipio.
J.P: ¿Cuáles son los principales retos que enfrenta
la policía de Chinchiná?
C. W.M: Esta mañana hablábamos con el señor alcalde y
llegamos a la conclusión de que es fundamental crear civismo. El civismo,
cultura ciudadana, es fundamental.
La cultura ciudadana en nuestro municipio nos
permitirá tener un mayor desarrollo y un progreso significativo. Va a marcar
pautas grandes en lo que es la seguridad. Nos enfrentamos a un municipio en
crecimiento, un municipio que tiene una otra forma a futuro, un crecimiento
turístico exponencial que debemos estar preparados para poder atender las
diferentes circunstancias que se nos presentan en nuestro municipio.
J.p: ¿Qué indicadores de seguridad se están
priorizando en su gestión?
C. W.M: Bien, los
tres principales son el homicidio, las lesiones y el hurto, poniendo de
antemano que el hurto y las lesiones son prioridad porque es algo que afecta al
ciudadano de a pie. Los homicidios, claro, lo tenemos como una prioridad y es
un estándar a nivel nacional y una exigencia de nuestros mandos
institucionales, pero si entramos a evaluar, el homicidio que tenemos en
Chinchiná, muchos de ellos son por asunto de cuentas, por microtráfico o por
situaciones de orden público en lo que tiene que ver con ajuste de cuentas, más
no afecta al ciudadano de a pie o al ciudadano comerciante o a las personas
trabajadoras.
J.P: ¿Qué medidas se están tomando para combatir el
consumo de sustancias psicoactivas, especialmente entre los jóvenes?
C. W.M: Estamos trabajando articuladamente con el
municipio, con la Secretaría de Desarrollo Social, con la Secretaría de
Seguridad, la Secretaría de Seguridad con el JINDE y de igual manera con la
Secretaría de Salud para lograr articuladamente poder mostrar resultados en
cuanto a esta problemática. Recordemos que el tema de consumo de sustancias
tiene que dejar de verse como un tema delictivo y verse como una enfermedad.
Eso es una enfermedad actualmente, una enfermedad social y por eso nos
integramos con la administración pública para mostrar resultados significativos
y eficientes al respecto. Es decir, la Policía Nacional podrá dar capturas,
capturar al consumidor y principalmente al expendedor que es el que más afecta
a nuestra ciudadanía, pero ahí hay un tipo de población que es víctima de esos
delincuentes y que están sumergidos en una actividad de consumo que es una
enfermedad, una enfermedad que se debe tratar desde la salud mental, desde la
salud y en un enfoque de desarrollo social y desde la Secretaría de Salud.
J.P: ¿Cómo se llevan a cabo los operativos para
desmantelar redes de venta de droga?
C. W.M: Los grandes operativos no es un trabajo
solamente de vigilancia ni mucho menos, es un trabajo en conjunto y articulado
que se logra entre SIJÍN, CTI y la Fiscalía General de la Nación. Es un trabajo
que puede durar meses, basadas en la información que recepciona la Policía de
Vigilancia, que es entregada a la Policía Judicial y quienes hacen una
investigación al respecto profunda y a su vez quienes ponen a disposición de la
Fiscalía para que emane las órdenes de allanamiento y las investigaciones
pertinentes.
J.P: ¿Qué papel juega la comunidad en la mejora de la
seguridad en Chinchiná?
C. W.M: La
comunidad es fundamental. Para nosotros lograr seguridad estamos enfocados
en lo que es Policía Nacional, Administración Pública y Comunidad. Uno de los
triángulos, una de las partes más importantes es la comunidad. La comunidad se
integra con la Policía Nacional en información, en soportes, en ayudas
necesarias para lograr esos resultados. Pero eso se logra
articulando los tres conceptos fundamentales para lograr lo que llamaremos
nosotros como seguridad integral.
J.P: ¿cómo puede ayudar la ciudadanía a mejorar la seguridad?
C. W.M: La
ciudadanía nos puede ayudar con información, orientándose y recibiendo los policías
en sus hogares
J.P: ¿Cómo está
funcionando la tecnología de vigilancia como las cámaras en el municipio?
C. W.M: Actualmente
tenemos cerca de 22 cámaras funcionando en nuestro municipio. Se espera una
inversión por parte del Ministerio del Interior en más Administración Pública
de 17 cámaras nuevas y efectivamente tenemos un funcionario exclusivamente para
garantizar la seguridad en la vigilancia 24-7 todo el tiempo.
Las cámaras nos han permitido dar resultados. El
último gran positivo que se logró, por ejemplo, fue la captura de un homicida
sobre el sector de Galería y yo me atrevo a decir que eso fue gracias a la
información de las cámaras y a la participación activa de nuestra comunidad.
J.P: ¿Qué mejoras se están planificando para
fortalecer la seguridad en Chinchiná?
C. W.M: Pues yo creo que es un trabajo articulado entre
Administración Pública y Policía Nacional.
Esas dos cosas más la comunidad nos permiten dar
resultados eficientes y progresivos para nuestro municipio. Se espera crear
estrategias, las estrategias se están realizando para poder lograr unas metas y
unos resultados en concreto sobre nuestro municipio.
J.P: ¿Cómo se manejan las denuncias de delitos en la
comunidad y qué se puede hacer para mejorar la confianza en las autoridades?
C. W.M: Las denuncias del delito se tienen que aportar a
nuestros policías de Policía Judicial.
Ellos recepcionan la información, la canalizan,
entran a verificar si es veraz o no y, de acuerdo a eso, se logran atender o se
atienden los requerimientos del ciudadano.
J.P: ¿Cómo mejoramos la confianza de nuestras autoridades?
C. W.M: Bueno, yo siento que sí hay confianza, lo que pasa es que a veces nos falta un poquito de cultura y hay que garantizar de una u otra forma el anonimato del ciudadano que quiere aportar y dar información para garantizar seguridad, pero es un trabajo que se debe hacer articuladamente. La luz y la esperanza de nuestro municipio siempre va a estar basado en la seguridad que pueda aportar la Policía Nacional, la Administración Pública, eso es lo que nos marca y nos diferencia.
Es justamente las instituciones y la creencia en ese Estado Social de Derecho lo que garantiza una seguridad. Sabemos y reconocemos que hay falencias, pero también somos conscientes que cada día mejoramos para poder llegar a ese ciudadano de a pie, a las zonas rurales, al campo, a las ciudades, con el fin de poder buscar un acercamiento. Chinchina no es ajeno a esa situación.
Esperamos muy pronto poder mejorar cada día el tema de seguridad en nuestro municipio. Le hacemos una invitación participativa a todas nuestras comunidades y a todas nuestras autoridades a que se suban a este tren, al tren de la victoria, que nos va a dar victoria sobre aquellos delincuentes, sobre ese flagelo que tanto azota a nuestras comunidades, pero eso lo logramos en conjunto, con un trabajo planificado entre Alcaldía, Comunidad y Policía Nacional. Dios y Patria.
Balance
de la Seguridad en Chinchiná El
Mayor Giraldo Marín informó en el recinto del Concejo Municipal que, hasta la
fecha, se han reportado siete homicidios en el municipio, de los cuales
cuatro han sido esclarecidos, lo que refleja un aumento en la capacidad de la
policía para resolver crímenes. Sin embargo, destacó que, aunque ha habido
una disminución en ciertos tipos de hurto, se ha observado un incremento en
las lesiones personales, particularmente en el contexto de la temporada de
cosecha, donde se han intensificado las riñas. Este fenómeno se atribuye en
parte a la llegada de migrantes del Cauca y La Guajira, cuyas costumbres en
la resolución de conflictos han influido en el comportamiento delictivo
local. En
cuanto al hurto a personas, se reportaron 95 casos en lo que va del año,
mostrando una reducción en comparación con años anteriores, aunque persisten
patrones de conducta asociados a grupos criminales específicos. En este
sentido, el Mayor subrayó la importancia de la colaboración ciudadana en la
denuncia de delitos. La
situación de los hurtos en residencias también ha mostrado una leve
disminución, aunque se ha identificado que muchos de estos son casos de
oportunidad. Para abordar el fenómeno de la población en situación de calle,
se propuso la creación de un plan de reintegración familiar, con el fin de
ofrecer soluciones integrales. |
En cuanto a las
incautaciones de drogas, se reportó un incremento alarmante en la marihuana,
con 13.589 unidades confiscadas en 2024 frente a 10.591 en 2023, y un aumento
significativo en el decomiso de basuco, que subió de 1.656 a 2.558. Las
incautaciones de cocaína también se duplicaron, de 200 a 407, y la base de coca
creció un 48%. A pesar de una ligera reducción en la confiscación de drogas
sintéticas, que pasó de 128 a 100, estos resultados evidencian que el
narcotráfico sigue siendo una amenaza latente que las autoridades deben
enfrentar con más firmeza.