Chinchiná, septiembre 25 de 2024.
Adolfo Tovar, abogado egresado de la Universidad Libre de Pereira, es uno
de los políticos más conocidos en Chinchiná. Su pasión por los animales, sus
críticas a la inseguridad y su defensa de los más vulnerables lo han convertido
en una figura singular. A pesar de haber sido candidato a la alcaldía, hoy en
día está fuera de los círculos políticos del departamento. No obstante, firme
en sus convicciones, ha intensificado su presencia en redes sociales, su
principal herramienta para mantenerse vigente y continuar con su política
laboral.
Tovar utiliza las redes para
denunciar la inseguridad, visibilizar su trabajo social y criticar abiertamente
a las autoridades, en particular al alcalde Carlos Alberto Riveros, a quien
responsabiliza de la situación de seguridad en el municipio. Muchos lo
consideran el líder de la oposición, ya a través de su cuenta de Facebook,
denuncia, sin importar la hora, lo que según él, los ciudadanos le informan.
En el marco de nuestro
informe especial sobre "Avances y Desafíos en Seguridad", conversamos
con Adolfo Tovar para conocer su visión sobre la inseguridad en Chinchiná y sus
propuestas para mejorar la situación. A continuación, sus opiniones y críticas
a las autoridades.
Entrevista
Jorge Patiño (J.P): Abogado, Bienvenido ¿Qué le preocupa
actualmente en relación con la seguridad en el municipio?
Adolfo Tovar (A.T): Muchas Gracias. Hay varias cosas. Primero, existe un cartel
de policías, durmiendo, sin priorizar el control interno de sus agentes. Esto
permite que las organizaciones criminales sigan creciendo en Chinchiná. Dos, ante el
primer punto, eso nos da un significado que los oficiales no dan prioridad al
control interno de sus policías, por lo tanto, se abre que se repotencialicen
por la falta de vigilancia mientras duermen. O no contestan las llamadas, se
repotencialicen las organizaciones criminales en el municipio. Tres, que no hay
redacción ni plan candado en el municipio de Chinchina, siempre se escapan con
las motocicletas cuando éstas han sido robadas.
J.P:¿Cuáles considera que son los sectores más peligrosos
de Chinchiná?
A.T: El
centro de Chinchiná es crítico, con problemas de hurtos, venta de drogas y
receptación, especialmente en el parque. Allí opera una organización que vende
celulares y objetos robados, sin ningún control de las autoridades.
J.P: Las autoridades señalan que muchas personas no
denuncian delitos y que esto afecta la imagen del municipio. ¿Qué opina al
respecto?
A.T: No voy a dar
opinión, voy a dar la certeza. Muchas personas no denuncian porque carecen del
analfabetismo funcional, no saben a dónde ir. Pero cuando saben a dónde ir, se disponen auxiliares bachilleres
escribiendo en un papelito, haciéndose pasar que le están recepcionando el
denuncio y sacan a la gente diciendo ya recibimos el denuncio. Tienen otras
estrategias también para no recibir el denuncio, para que no interpongan el
denuncio, para que se les mejoren las estadísticas. Las autoridades mienten que
muchas personas no denuncian los delitos, es porque las mismas autoridades son
las que no están recepcionando los denuncios y eso hace que la gente no vaya a
denunciar.
Pero también, ojo, rumores que afectan la imagen
del municipio. Los que están aquí generando la mala imagen del municipio es la
misma policía que carece de políticas criminales, pero sí de políticas de
maquillaje para detrimir a aquellos que hacen la denuncia social.
J. P: ¿Qué estrategias cree que se deberían implementar
para mejorar la seguridad y apoyar el comercio local?
A.T: Es muy difícil implementar estrategias en el
municipio de Chinchina con policías que carecen de habilidades transpersonales,
interpersonales e intrapersonales. La policía le miente al ciudadano, maquilla
las estadísticas y siempre salen diciendo todo va bien en el municipio de
Chinchina. Es muy difícil implementar estrategias cuando hay policías que
siguen durmiendo en parqueaderos, bombas de gasolina, en las casas de la novia,
en fincas cercanas al municipio o en establecimientos públicos a nivel local
como la ludoteca y el parque de las piscinas
Es el mismo comercio local que en este momento
está estableciendo a través de Adolfo Tovar estrategias para reaccionar, para
prevenir, para ilustrar a los ladrones que llegan a nuestro municipio y así
tener más atención al respecto.
J. P: ¿Cuál es la principal queja de los ciudadanos en
materia de seguridad en el municipio?
A.T: La principal queja es la falta de reacción de la
policía, la falta de compromiso social de la policía, la omisión de la policía
en implementar verdaderamente estrategias, pero sí comunicaciones estratégicas
para ellos tener una buena imagen ante su falta de operatividad.
J. P: Siendo usted un ciudadano de Chinchiná, ¿por qué
decide llevar a las redes sociales las quejas que recibe de la comunidad?
A.T: Porque es una forma de presionar y de mostrar
y de desmaquillar la falta de presencia policial en la materialización de
políticas de seguridad en nuestro municipio, porque el artículo 19 de la
Declaración Universal de los Derechos Humanos establece que se pueden realizar
a la vez denuncias sociales y, sobre todo, nuestras casas no son rumores, se
muestran a los ciudadanos con malas conductas, realizando hurtos, robando,
atracando, estafando, metiendo billetes falsos.
J. P: ¿Cuántas de las quejas que recibe se formalizan como denuncias?
A.T: De lo que no sé no hablo, no llevo las
estadísticas de cuántas de las quejas que recibo se formalizan como denuncia,
toda queja que yo recibo estimula al ciudadano a que denuncie, pero algunas
veces uno de ellos dicen fuimos a la estación de policía y no nos recepcionarón
las denuncias, a lo cual yo invito a que vayan a la personería y establezcan
los diferentes procesos que hay ante la omisión de las autoridades competentes
al respecto.
J. P: ¿Ha notado un aumento en el número de habitantes de
calle en Chinchiná?
A.T: Claro que sí, porque hubo un pacto, lo puede
poner entre la policía y un microtraficante poderoso que ya está detenido,
capturado, fue capturado y ese individuo hizo un pacto con la policía y se
desarrolló con otros carteles de microtráfico, entre más habitantes de calle
hubieran en Chinchina, más la policía durmiera en la noche, ellos, los
habitantes de calle, podían consumir más y en la noche, por la falta de
control, robar más de tal forma que pudieran proveerse para consumir y ahí
aumentar las vacunas del microtráfico que dan a la Policía Nacional por el tema
del bazuco.
J. P: ¿Qué información tiene sobre estos habitantes de
calle, como su origen, ¿quién los trae y dónde viven?
A.T: No es mi deber tomar arraigo ni estar los
entrevistando, pero sí, quién los trae, sí me indican que ellos los traen en
camionetas y en tractúmulas, las tractúmulas particulares, porque aquí se
procesa el mejor bazuco, dándose entonces el tema, el eje cafetero, el tema de
que aquí hay un pacto entre la policía y los microtraficantes para que haya más
habitantes de calle y lo otro, y dónde viven debajo de los puentes, pero sí
también los traen, los habitantes de calle los traen también carros
institucionales o contratados por alcaldías vecinas a Chinchiná.
J. P: ¿Cree que los problemas de seguridad se solucionan
cambiando a la policía y a las autoridades administrativas, como el secretario
de gobierno?
A.T: Yo creo que la policía por cambiarse se soluciona
este tema, siempre llegarán los mismos policías programados con el mismo
software, de ineptitud, omisión, de realizar maquillaje y acostarse a dormir, y
ser permeados por el microtráfico para ganar plática con las vacunas.
Lastimosamente se podría mejorar algo, es no traer policías como zona de
castigo Chinchina, policías con procesos disciplinarios o sancionados al
municipio, porque Chinchina es muy duro.
No, sería traer los mejores policías de las
diferentes áreas por un tiempo para que moldearan el municipio con estrategias
psicosociales, porque hay policías excelentes, pero eso sería algo imposible,
No creo que el Secretario de
gobierno tenga la culpa, porque él está escuchando mucho a la comunidad, es la policía,
la que quema hasta un alcalde y un secretario de gobierno por la ineptitud, pero el alcalde
tiene que ponerse los pantalones. Mejor dicho, necesitaríamos un cambio de
alcalde, este no tiene pantalones.
J. P: ¿Considera que el alcalde está cumpliendo
adecuadamente en materia de seguridad?
A.T: El alcalde, no está cumpliendo adecuadamente en
materia de seguridad, porque no está haciendo presencia de comando ante la
misma policía de Chinchiná, como si lo está haciendo el alcalde de la ciudad de
Pereira y el alcalde de Bucaramanga.
J. P: ¿Qué consejo le daría al alcalde en relación con la
seguridad del municipio?
A.T: ¿qué consejo le puede dar a este individuo?
J. P: ¿Cuál es su opinión sobre los resultados más
recientes de la policía?
A.T: Son unos resultados que todavía resultan
escuetos, porque no solamente la judicialización y lograr las medidas
intramurales de los individuos, que eso sí se da ante los jueces de
conocimiento, es realizar un verdadero control preventivo y presencia de comando
y de reacción y de operaciones psicosociales con las comunidades que podamos
lograr una mejor seguridad.
J. P: ¿Cómo afectan los problemas de seguridad en la vida
cotidiana de los residentes de Chinchiná?
A.T: Claro, en su tranquilidad, en su salud mental, en
la paz, en el sosiego que merecen, en que no pueden hacer ocio, ni deportes en
ciertos escenarios, porque les da temor. Se encierran las señoras a horas más
temprano, la gente pierde su salud mental, tiene una percepción de inseguridad,
lo cual causa daño hasta en el propio sueño de las personas.
No andan ya con sus celulares mucho, no andan con
comodidad con su dinero, el dinamismo comercial se rompe y la imagen en turismo
se daña, pero es por los policías, no por la gente que hace las denuncias
sociales en Chinchiná.
La entrevista con Adolfo Tovar deja claro su
profundo descontento con la gestión de la seguridad en Chinchiná, apuntando
directamente a la Policía Nacional como principal responsable. A lo largo de
sus respuestas, Tovar sostiene que la falta de control interno en la policía,
la corrupción y las omisiones de las autoridades han permitido que el crimen
organizado crezca en el municipio. Asimismo, denuncia la complicidad de algunos
oficiales con grupos de microtráfico, lo cual, según él, ha fomentado un ambiente
de inseguridad que afecta la tranquilidad y el bienestar de los ciudadanos.
Tovar también enfatiza la ausencia de un
liderazgo efectivo por parte del alcalde y propone que el verdadero cambio en
la seguridad requeriría no solo un relevo en las fuerzas policiales, sino
también una renovación del compromiso de las autoridades locales. Aunque sus
palabras pueden parecer duras, reflejan la frustración de muchos habitantes
que, como él, perciben una creciente falta de respuesta y acción por parte de
las instituciones encargadas de protegerlos.
En definitiva, Tovar pinta un panorama sombrío, donde la solución
parece lejana sin una transformación profunda y estructural
de las políticas de seguridad en el municipio.
Espere mañana en nuestro cuarto informe la visión de la Policía Nacional.